Es común recurrir a dietas cuando el peso ya no te permite realizar actividades con facilidad. O bueno, también si lo hace más por verse bien ante los demás. Fuera de cualquier excusa, librarse de esta piedra no ha sido fácil para nadie.
Sin embargo, Georgie Thomas, una joven estadounidense, halló un método para poder bajar 25 kilos sin tener que pasar por una estricta dieta del nutricionista.
En conversación con el Daily Mail, contó que tuvo que probar muchas formas de bajar de peso, pero nada funcionaba. Confesó además que no era de hacer ejercicios.
Llegó hasta el punto de la desesperación. Los alimentos que comía en el día sumaban 1.200 calorías. Pero su estrategia se basó en alimentos integrales de 1.500-1.800 al día.
“Tres años y medio más tarde sigo el mismo programa y puedo ajustarlo cuando sea necesario, lo que demuestra que se trata de un verdadero cambio de estilo de vida”, aseguró.
Al mismo tiempo, la mejor decisión fue dejar el sedentarismo. Empezó a ir al gimnasio. Todo el proceso lo compartió en su cuenta de Instagram y en su página web.
“Cuando intenté bajar de peso en mi primer año de universidad, probé Body Trim, Lite y Aasy; y luego, cuando terminé Human Movement y pasé a fisiología del ejercicio, traté de hacer las cosas según el libro: comer y ejercitarme más para alcanzar mis objetivos”, escribió.