Al menos 120 casos de secuestros se han registrado desde el 2005 hasta la fecha, la mayoría en el interior del país, principalmente en las provincias del Cibao, lo que evidencia el auge de esta modalidad del crimen.
El último caso ocurrió hace cuatro días en Moca, provincia Espaillat, cuando fue secuestrado el agricultor Neftalí Moreta Rosa, quien aún no ha sido rescatado.
Según los reportes de prensa, muchos de estos secuestros se hacen por asuntos de deudas contraídas en el exterior tanto por las víctimas como por familiares de éstas.
También por problemas de drogas o por asuntos de trata de personas, como sucedió a 10 jóvenes mantenidas en cautiverio en Haití, a quienes el dueño de un lupanar exigía que se prostituyeran.
Se destacan los secuestros a extranjeros que tienen negocios en el país o para exigir dinero a sus parientes en sus países de origen.
Los auto secuestros también forman parte de la lista y normalmente lo hacen hijos jóvenes en combinación con particulares para obtener de sus padres altas sumas de dinero.
Otro elemento que resalta en las crónicas de los plagios es que algunos de los secuestrados son llevados hasta Haití y desde allí los captores inician las negociaciones con los familiares.
Muchas de víctimas de secuestros son niños, por cuyo rescate los padres acceden rápido a buscar las sumas requeridas.
También es notorio que muchos secuestrados logren escapar de las manos de sus captores.
Policía. Cabe resaltar que un gran número de los secuestros son resueltos a tiempo por la Policía Nacional, logrando recuperar vivos a los raptados y capturar a sus plagiadores, algunos de los cuales han muerto a manos de los agentes.
Pero aún quedan sin resolver, sin embargo, algunas desapariciones.
Pocas condenas. Sin embargo, los reportes dan cuenta de que las condenas por secuestros son mínimas y los sometimientos no agotan todo el proceso legal.
Pagos. Las exigencias de pago para la liberaciones van desde RD$30,000 hasta RD$8 millones, según los relatos.
En algunos casos, las familias llegan a pagar las sumas exigidas por los secuestradores.
Pero no siempre que se paga el dinero requerido los familiares lo informan, por temor a represalias.
Cronología. En el año 2005 se contabilizaron 31 secuestros. En uno de esos casos la víctima fue asesinada. Se trató del italiano Roberto Gazparela. No se estableció el monto que pidieron sus raptores.
En el 2006 se registraron al menos 27 retenciones por diversos motivos. En este grupo se registran un comerciante y su ayudante en la Capital, cuya aparición no se ha reportado aún.
En el 2007 se verificaron 35 secuestros. Dos víctimas murieron: Tommy Jennsy Infante y Eduardo Honoret García, quienes habían sido plagiados en Santiago.
En el año 2008 ocurrieron al menos 18 casos de secuestros. Todos resueltos. Mientras que en el año 2009 se registraron doce.
En lo que va del 2010 se han reportado varios casos de secuestros. Uno de estos es el del italiano Federico Dalmasso, en Boca Chica, quien supuestamente pagó un millón de pesos por su liberación.
Caso Baldera
A finales de septiembre de 2009 fue secuestrado en Nagua, provincia María Trinidad Sánchez, el joven Eduardo Antonio Baldera Gómez, de 23 años, hijo de un comerciante, quien logró escapar de sus captores 23 días después de estar cautivo en Montecristi.
Este fue un caso muy notorio y mantuvo en vilo a familiares, la población y a los investigadores de Policía Nacional.
Muertos
Una vez el joven se escapó, agentes de la Policía asesinaron a Cecilio Díaz y Wilian Batista, en un supuesto enfrentamiento con agentes, pese a que un video demostró que Batista fue entregado a una patrulla policial.
Desaparecido
Juan Almonte, un empleado privado de Santo Domingo, fue implicado en el caso. Desde entonces está desaparecido. Familiares afirman que policías lo mataron.
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