La Cámara de Diputados no conoció el proyecto que crea el museo histórico a la era de Trujillo, debido a el autor de la iniciativa anunció su retiro.
El diputado perredeista, Leivin Guerrero, aclaró que el retiró el proyecto consciente de que nunca se prestó a cosas indebidas y muchos menos a inmorales, sino porque se lo solicitaron algunas personalidades y sectores de la sociedad.
El congresista del partido blanco por San Cristóbal agradeció a los diputados su manifestación de respaldo y a los diferentes sectores de la sociedad.
Recalcó Guerrero que el museo fue mal interpretado por algunos, tejervisado por otros y mal interpretado por muchos.
Expuso que en ningún momento quería exaltar la figura de Trujillo, “sino que el espíritu del proyecto era recoger los aspectos turísticos e históricos que dejarían beneficios a nivel cultural y económico para mi provincia San Cristóbal”.
Aclaró que “nunca he sido trujillista, no viví en ese régimen, y provengo de un partido que se fundó sobre la base de la lucha democrática en contra de la dictadura”.
Indicó que la historia del país no puede ser dirigida con estrictamente compasión ni con resentimiento e insistió que su proyecto era crear un museo, no un monumento a Trujillo.
Subrayó que está convencido de que en igual que en la democracia, a igual que en la dictadura, ha habido luces y sombras.
Dejó en claro que en la historia de su provincia el único que ha sido reelegido en tres período de manera consecutiva, “y quiero representar a los mejores y más sanos intereses y bienestar de su provincia y el país”.
Apuntó que se pasó varios años investigando y visitando museos en todo el mundo, para crear el museo histórico de Trujillo, como se han creado los de Hitler y el holocausto, Jack el Destripador, Alcapones, Pinochet, Starling Lenin, El valle de los caídos, entre otros, que recogen la historia y la vidas de sus protagonistas, dictaduras y guerras, los cuales hoy son famosos y visitados, dejando grandes beneficios económicos.
Publicar un comentario