Beber agua sin duda puede provocar sensación de saciedad, pero hay una creencia popular, en la que si tomas mucha agua puedes subir de peso. Pues bien, comencemos dejando claro que el agua aporta cero calorías al organismo, antes, durante o después de comer.
Lo recomendable es tomar al menos dos litros de agua diariamente, pero el tema de comer junto con el vaso de agua alado, puede ayudarte a que te de menos hambre.
Beber agua justo antes de una comida puede engañar al estómago y llevar a comer menos, además de que estimula el funcionamiento de los riñones para un buen equilibrio hídrico y facilita la digestión.
Beber agua "te sube de peso" cuando la tomas en exceso
En efecto, únicamente aporta peso a tu organismo, la cantidad de líquido que ingieras. Si bien el agua es un diurético natural, también puede tener un efecto inverso si lo consumes en exceso.
Una dieta muy alta en sodio (sal) y excesiva en agua, superando los dos o tres litros al día, reduce el potasio en el organismo y por lo tanto se presenta la retención de líquidos.
Evita la "hinchazón"
La retención de líquidos puedes notarla si tus manos, pies o piernas se hinchan. Modera tu consumo de líquidos y sales para que tu organismo funcione correctamente.
Si tomas agua en exceso además estarás diluyendo los minerales que se encargas de equilibrar los electrolitos. (Salud180)