El cuerpo de Manuel Paulino Peña, un joven de 19 años que nació en la República Dominicana, fue hallado torturado en un camino de terracería en Playas de Rosarito, luego de que ser atacado a balazos y levantado la madrugada del 10 de abril pasado.
De acuerdo con informes de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), cerca de las dos de la mañana de ese martes, Paulino se encontraba con su medio hermano Antonio López, en una playa ubicada a unas cuadras del principal bulevar de ese municipio “Benito Juárez”, bebiendo y conversando.
Según las primeras declaraciones, cuando los jóvenes salían de la playa un par de hombres a bordo de un vehículo Honda color negro, se les acerco y se les abalanzaron para golpearlos, cuando intentaron huir, uno de ellos sacó un arma y les disparó, hiriendo a López en la cadera, mientras que a Paulino lo subieron al carro y se lo llevaron.
El joven herido fue traslado a un hospital de la ciudad donde lo reportaron estable, pero de Manuel ya no se tuvo noticias hasta que le informaron a la familia que había sido levantado y ese mismo día, su madre, Cristina, comenzó con una pesquisa en redes sociales pidiendo el apoyo de la gente para localizarlo.
Fue hasta el jueves pasado cuando la fiscalía estatal halló durante la tarde, entre las 14:00 y 15:00 horas, el cuerpo del joven dominicano, abandonado en un camino de terracería situado en la colonia Morelos, cerca de donde opera la perrera municipal, con el rostro desfigurado a golpes y una herida de bala en la cabeza.
Según la autopsia realizada por médicos del Servicio Médico Forense (SEMEFO) la causa de su muerte fue: trauma craneal secundario a herida perforante de cráneo por proyectil de arma de fuego. Le dieron un tiro de gracia.
En una entrevista vía telefónica, Cristina, la madre de Paulino, dijo que recién le informaron sobre el hallazgo de su hijo, y que según las primeras declaraciones “estaban tomando en la playa, trataron de salir pero chocaron con un muro y una gente los sacó a golpes, los balearon y a uno lo liberaron pero al mío se lo llevaron”.
La Subprocuraduría de Investigaciones Especiales (SIE) de la fiscalía estatal tomó el caso debido a que además del homicidio, obtuvieron información que la familia del joven dominicano recibió una petición de dinero, por lo que podría tratarse de un secuestro.
De enero a marzo de 2018, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) reportó que en Playas de Rosarito se han registrado 23 asesinatos, uno menos que en el mismo periodo del año pasado.