75 agentes de la Policía Nacional, de los cuales varios pertenecían a los Topos y el DICRIM, ultimaron un individuo en su casa localizada en Villa María, Santo Domingo.
El ultimado fue identificado como Franklin Quezada Matos. Los agentes lo sorprendieron en su casa cuando este se encontraba descansando con su esposa e hija.
De acuerdo al testimonio de los vecinos, Quezada Matos era un vendedor de sustancias ilícitas y por negarse a pagarle el peaje a los agentes estos lo mataron.