Ejercicios fáciles para perder peso entrenando en casa


Con el ejercicio físico obtenemos otra ventaja y es que perdemos grasa y ganamos músculo. De esta manera se crea una recomposición corporal lo que hace que, aunque pesemos lo mismo – el músculo pesa más que la grasa – nuestro cuerpo se vea más estilizado, más definido y con menos volumen.

Ejercicios sencillos que nos ayudan a perder peso entrenando en casa.

Burpees

Los burpees son el ejercicio más temido de todos y, sin embargo, sin excelentes para ayudarnos a perder peso. Eso sí, si somos principiantes no es nuestra mejor opción, ya que requieren que tengamos cierta forma física de base y si no lo realizamos correctamente corremos el riesgo de lesionarnos.

Plancha abdominal

Las planchas o planks son una de las maneras más efectivas que tenemos de trabajar el core y lo haremos, de nuevo, con nuestro peso corporal, sin necesidad de ningún material. Al realizarla debemos recordar no elevar ni bajar demasiado la cadera – la idea es que nuestro cuerpo esté alineado – y mantener los codos justo debajo de los hombros. Existen diferentes variaciones, de manera que podemos empezar por las más sencillas.

Zancadas

Las zancadas son otra manera de trabajar la musculatura del tren inferior, al mismo tiempo que ejercitamos el equilibrio. Si le añadimos peso en las manos podremos trabajar más el core al necesitar más equilibrio para compensar.

Flexiones

Las sentadillas son un básico para entrenar nuestras piernas y glúteos, pero si lo que queremos es trabajar los brazos, las flexiones son el ejercicio por excelencia. Igual que ocurre con las sentadillas, trabajamos la fuerza con nuestro peso corporal, pero también ejercitamos el sistema cardiovascular. Si somos principiantes podemos iniciarnos haciendo las flexiones de manera inclinada, apoyándonos en una silla o en un sofá. También podemos hacerlas en el suelo con las rodillas apoyadas.

Sentadillas

Las sentadillas son un básico en cualquier rutina, y uno de los ejercicios que más nos pueden ayudar. A pesar de ser muy sencillo, es muy efectivo ya que nos ayuda a trabajar el tren inferior con nuestro propio peso, al mismo tiempo que acelera nuestro ritmo cardíaco. Existen diferentes variaciones, pero la más clásica y utiliza necesita que abramos los pies a la anchura de la cadera y mantengamos los pies mirando hacía adelante. El movimiento es el de sentarnos como si tuviéramos una silla detrás – podemos ponerla si nos resulta más sencillo – manteniendo la espalda recta.

Post a Comment

Artículo Anterior Artículo Siguiente